Cuando a un toldo, a un corredero técnico o a un techo acristalado se le pone un cierre perimetral, se convierte en un espacio diferente, protegido del viento, del sol y de la lluvia. Se crean terrazas polivalentes, tanto cuando están abiertas o cerradas, con un cierre perimetral abierto o cerrado. Ofrece múltiples posibilidades.